jueves, 7 de enero de 2016

Tema, resumen y soluciones a NO NEGATIVO



                                          No negativo

Últimamente el idioma se nos está complicando más de la cuenta allá donde menos podíamos esperar. El lío se produce con dos monosílabos que creíamos elementales. El sí y el no. O, si lo prefieren, la afirmación y la negación, lo positivo y lo negativo. Parecían dos nociones manejables, pero dejan de serlo cuando uno lee, por ejemplo, la noticia de que el ciclista Astarloza ha dado no negativo en el contraanálisis de sangre. Todos entendemos que quiere decir dopado, o, si lo prefieren, positivo; pero entonces, ¿por qué someter las palabras a la incertidumbre de estos acertijos? No hay ninguna necesidad de sumar dos negaciones para construir una afirmación, y sin embargo es lo que se hace, como si de esa manera el positivo del deportista fuera más venial, menos culposo. En el mismo orden de cosas, la medicina empieza a llamar 'heridas incompatibles con la vida' a lo que antes eran, tajantemente, heridas mortales. Negar para afirmar, otra vez.
Por supuesto, todo esto es producto de la vieja obsesión eufemística. Las palabras ya no están para designar a las cosas con la mayor precisión posible, sino para dulcificar lo hiriente y enmascarar lo feo y lo dramático. Cuando algo nos incomoda, en vez de hacerle frente o tratar de cambiarlo resulta mucho más sencillo intervenir sobre las palabras que lo designan. Piensen en ese crecimiento negativo del que nos hablan tanto los economistas y los políticos. «El PIB de Italia registrará un crecimiento negativo del 5,2% en 2009»; o, este es ya para troncharse, «el IPC ha crecido un menos 0,2 puntos». ¿No existía el verbo «decrecer»? U otros verbos como menguar, bajar, reducirse, caer. Si una cosa aumenta de tamaño, crece. Pero es difícil entender que también crezca al encogerse. Y así el lenguaje va perdiendo su silueta diluido en la bruma, zarandeado por estos giros tan innecesarios como diabólicos que lo van haciendo irreconocible.
Tal vez de eso se trata, de confundirnos poquito a poco hasta que todo sea uno y lo mismo, y las palabras, como decía el Humpty Dumpty de Carroll*, signifiquen lo que cada uno quiera que signifiquen. Nos guste o nos disguste. Sí o sí (otra moda que se las trae, ésta de la falsa alternativa entre dos afirmaciones iguales). Por de pronto, la verdad matemática ya se tambalea desde que no sabemos qué es más y qué es menos, dónde está lo positivo y dónde lo negativo. Ya falta poco para que logremos no distinguir entre lo cierto y lo falso.

                                                                                        José María Romera


*Esta cita fue eliminada en el examen











Tema: el abuso creciente de eufemismos para confundir a la sociedad
Resumen:
 Cada vez aparecen más expresiones eufemísticas cuyo único objetivo es disfrazar la realidad en múltiples campos de la actividad social en vez de afrontar los problemas. Hay gente que quiere manipular a los ciudadanos para que no  entiendan lo que pasa de verdad.
Tipología: Un título abiertamente llamativo (No negativo), la firma de un colaborador habitual de El Correo, el uso de expresiones modernas (dopado, no negativo, crecimiento negativo, etc.) y la referencia a una realidad relativamente reciente (últimamente…) nos llevan inequívocamente a pensar que estamos delante de un texto perteneciente al ámbito periodístico.
                El uso repetido del plural inclusivo (se nos está complicando), la defensa de una tesis (los crecientes eufemismos consiguen confundirnos), la estructura deductiva que se sigue y los tres ejemplos prácticos conocidos por todos de los que se vale su autor para una mejor demostración de aquello que  defiende nos permiten incluir este texto dentro de la modalidad argumentativa- expositiva. A la parte expositiva le corresponde los ejemplos objetivos que utiliza.
    La convivencia del nivel culto (monosílabos, eufemístico, etc.) con el nivel coloquial (troncharse)  es una prueba  de la pertenencia del texto al subgénero de artículo de opinión. Otras pruebas que así lo avala es el uso del vocabulario valorativo y literario (diluido en la bruma, zarandeado, diabólico, etc.). Finalmente el hecho de encontrar una sintaxis simple (el sí y el no) compatible con una sintaxis más compleja confirman lo dicho anteriormente. Además, no podemos pasar por alto las preguntas retóricas (¿No existía el verbo decrecer?) y las continuas explicaciones dirigidas a los lectores (Piensen en ese crecimiento negativo…, y así el lenguaje.., Las palabras ya no están para…, etc).
En el texto domina la función apelativa porque lo que se busca es convencer a los lectores de la perversión ideológica y el peligro que implica la confusión eufemística.

3- Identifique los campos semánticos más relevantes del texto e indique su relación en el tema del texto:
Simplificación: menguar, bajar, reducirse, caer
Negación: negación, lo negativo, el no
Afirmación: afirmación lo positivo, el sí
Los eufemismos  no hacen más que simplificar la realidad, negar la complejidad de la vida. El eufemismo, con su positivismo, encubre  lo que realmente pasa. Si en ciertos casos tiene justificación por ser más cortés, más fino o más educado; en otros casos, utilizado por el poder, se pueden volver perversos para poder entender el mundo. Dado el tema, está más que justificado la aparición de los campos arriba señalados.

b) Identifique los eufemismos que aparecen en el texto y la palabra o expresión a la que sustituyen (1 punto)
Eufemismos: no negativo / dopado; crecimiento negativo / retroceso de la producción; incompatibles con la vida / mortales