domingo, 11 de marzo de 2018

Aplicacion práctica de las justificaciones a la tipología textual de MENORES DELINCUENTES



MENORES DELINCUENTES
Los sucesos violentos protagonizados por menores de edad en las últimas semanas han generado una cierta alarma social, lógica dada la gravedad de los hechos: la muerte de un hombre en pleno centro de Bilbao, agresiones sexuales, robos, intimidaciones violentas... La acumulación en unos pocos días de delitos de ese tipo y la constatación de que a uno de los implicados en el homicidio de Ibon Urrengoetxea no se le podrán exigir responsabilidades penales al tener solo 13 años han desencadenado un encendido debate. En él pugnan, por un lado, los partidarios de un endurecimiento de la legislación vigente y de la imposición de ­­castigos ejemplarizantes; y, por otro, quienes reivindican la bondad inocente de todo joven, cual ‘Emilio’ de Rousseau. Se impone un llamamiento a la cordura, a la reflexión serena y a considerar las aportaciones de los expertos en esta materia. La comprensible conmoción que causan sucesos tan trágicos no puede hacernos olvidar que los delitos cometidos por menores son una excepción, no un fenómeno habitual. Ni que el sistema judicial cuenta con recursos suficientes para reeducar a los jóvenes que han delinquido, como lo demuestra el altísimo nivel de reinserción social que ofrecen los centros especializados.
La ley prevé un distinto tratamiento en función de la edad, con la aplicación de penas más rigurosas de reeducación o internamiento en régimen cerrado para los que tienen entre 16 y 18 años que para los de entre 14 y 16. Tiene sentido abrir un debate sobre los posibles excesos garantistas de la ley, la conveniencia de aumentar el control de los planes de seguimiento familiar y personal, y las condiciones de internamiento del sector más reincidente -minoría entre la minoría- de jóvenes que han hecho de la conducta antisocial su modelo de vida. No parece que la rebaja de la edad penal -situada ahora en 14 años- sea defendida de forma mayoritaria por los expertos. Esta medida, planteada siempre al calor de tragedias recientes, sería más efectista que eficaz. Un reforzamiento de las labores de prevención y educación garantiza mejores resultados para afrontar un problema que requiere el trabajo conjunto de familias, educadores, Policía, Judicatura y expertos en trabajo social, entre otros sectores. Del éxito de esa tarea depende una mejora de la seguridad en las calles y también la integración de un sector de nuestra juventud al que es necesario alejar de la exclusión social y la marginalidad.
                               (editorial de El Correo del 12-01-2018)
Cuestiones:
Tema (1 punto)
Resumen (1 punto)
Argumente a favor o en contra del texto en cursiva aportando argumentos que avalen lo que defiende. (220 palabras como mínimo) (2 puntos)
Argumente el género y subgénero al que pertenece este texto aportando 4 razones. (2 puntos)

RESPUESTAS
TEMA: defensa de un replanteamiento sereno de la legislación sobre menores.
RESUMEN: Recientes sucesos graves protagonizados por menores en Bilbao han despertado la alarma social y provocado el replanteamiento de su impunidad por parte de gente soliviantada. Es mejor aplazar el debate para afrontarlo con serenidad y pedir a los sectores implicados, entre tanto, que se esfuercen en reconducir la situación.
JUSTIFICACIÓN DE LA TIPOLOGÍA TEXTUAL

A)           Justifica la pertenencia de este texto al ámbito periodístico.
El mundo periodístico está abocado a afrontar la realidad más inminente de todos los contextos (exceptuado la de las redes sociales,  que es aún más inmediata). Así no resulta extraño encontrar:
             La referencia a una realidad reciente: en las últimas semanas….
             El desarrollo apresurado de un tema complejo que apenas se ventila en 30 líneas.
             El hecho de no estar firmado, lo cual nos permite deducir que se trata de un editorial.
             El planteamiento de un tema de interés social y polémico: han generado una cierta alarma social.

B)           Justifica  la modalidad discursiva a la que pertenece este texto.

No cabe duda de que pertenece  a la modalidad discursiva de la argumentación puesto que pretende convencer al lector de una actuación serena frente a hechos tan graves y alarman; por consiguiente, son varias las razones que así lo avalan:
             Hay una tesis: Las instituciones implicadas han de hacer un replanteamiento sereno de la ley del menor.
             Hay un tema: la impunidad de los menores que otorga la ley.
             Hay argumentos: 1) el de ejemplificación con el último caso: un chico de trece años
             El de autoridad: la ley dice…, y  el de autoridad también: La opinión de los expertos..
             Hay una estructura: La tesis está formulada en el primer párrafo: se impone un llamamiento a la reflexión…(l. 10 ),
             Hay abundantes explicaciones dirigidas a los lectores: No es un fenómeno habitual (l. 13 ), sería más efectista que eficaz(l. 25), minoría entre la minoría(l. 22 ).

C)           Justifica el género y el subgénero a los que pertenece el texto
Ya hemos dicho que se trata de un editorial(género de opinión, subgénero editorial) en el cual el periódico expone su visión ideológica del problema. Normalmente, si no hay intereses políticos, se busca apagar fuegos y colocarse en un lugar intermedio a la hora de afrontar esas cuestiones sociales problemáticas.
 En este sentido podemos encontrar:
             Un léxico valorativo: gravedad (l. 1 ), encendido debate (l. 7 ), penas más rigurosas (l. 17 ), exclusión social y marginalidad, (l. 30 ), etc…
             El recurso al plural inclusivo: no puede hacernos olvidar…(l. 12 ), nuestra juventud (l. 30).
             Ausencia de la primera persona del singular por ser, precisamente, un editorial y proponer una solución más objetiva.
             Una modalización prudente propia del subgénero: Se impone un llamamiento a la cordura, a la reflexión serena , sería más efectista que eficaz.
             La no visibilidad de responsables, encubiertos en un texto despersonalizado: Los menores implicados apenas aparecen como responsables de los delitos: los  sujetos de las oraciones no son personas sino sucesos o instituciones, las oraciones impersonales completan este panorama tan aséptico.